EL SILENCIO DE LOS CORDEROS

El Rey reclamó un pacto de Estado.

“Hora de grandes esfuerzos y amplios acuerdos y recuperar juntos y con la debida determinación las graves consecuencias de la crisis”. dijo el Borbón.

No me voy a extender mucho esta vez, pues las palabras del Monarca se comentan solas.

Cuando se está aprueba una Ley –como la del aborto- que condena a muerte a miles y miles de niños inocentes- NO SE OYE LA VOZ DEL REY.

Cuando se está a punto de cometer una sedición en uno de los territorios de la Nación más antigua de occidente –España- donde el TC está cocinando el Estatuto de Autonomía que pone fin, por la vía de los hechos consumados al Estado como tal, admitiendo la existencia de dos naciones: NO SE OYE LA VOZ NI DEL REY NI DE ROQUE.

Cuando el gobierno de la Nación, presidida por el Sr. Zp, estaba encamado con ETA, negociando la secesión, también, de las provincias vascas a cambio de que nos dejaran de matar, nadie ESCUCHÓ LA VOZ DEL MONARCA.

Cuando los soldados españoles –de los que por cierto es Capitán General- salieron en medio de la mayor rechifla e ignominia de Irak, entre las burlas del contingente polaco e italiano, cuando están muriendo en Afganistán –van 91- utilizando dizque blindados construidos en 1970, cuya protección es de ¡aluminio! NO SE OYE NADA.

Cuando la ruina institucional de la nación española es de tal calibre, que la ruina económica es una fruslería y una pijada comparada con ésta, con las instituciones corrompidas hasta la médula, jueces nombrados por los partidos políticos, otros que piden –y reciben- dinero del Banco Santander, por ejemplo, los diputados y senadores llevándoselo crudo a sus casitas y cobrando pensiones vitalicias tras los “agotadores” años de mandato, cuando estamos gobernados por memos y analfabetos funcionales que apenas han terminado bachilleres o carecen de titulación alguna –ejemplo el Ministro de Trabajo- o Montilla, o Pepiño, o el propio Zapatero que jamás trabajó en nada….NO SE ESCUCHA NADA, MAJESTAD. PERO NADA DE NADA.

SERÁ QUE EL CALLA OTORGA.

Conclusión, Majestad, ahora tenemos que salvarle el culo a Zp. ¿Es así?